Un grupo de investigadores usaron Plants vs. Zombies (PvZ) como una intervención para mejorar la salud mental de pacientes en los que el tratamiento psicofarmacológico tradicional no estaba funcionando. Este videojuego, que no fue diseñado específicamente para ser utilizado como una intervención psicoterapéutica, se usó en dos experimentos con personas que tenían síntomas de ansiedad y de depresión.

En ambos casos, los pacientes estaban realizando un tratamiento psiquiátrico pero no se observaba que mejoraran, los síntomas continuaban presentes. Ante esta situación, los investigadores les ofrecieron a los pacientes elegir entre dos opciones: probar con un psicofármaco distinto al que habían usado (ansiolítico o antidepresivo según el experimento) o jugar PvZ. En concreto, tenían que jugar PvZ entre 30 y 45 minutos, cuatro veces por semana, durante un mes.

En el experimento con pacientes que experimentaban ansiedad se observó que el grupo que jugó PvZ tenía menos síntomas luego del mes de jugar al videojuego. En cambio, el grupo que recibió el psicofármaco no mejoró significativamente, sus síntomas aún estaban presentes.

En el experimento con pacientes con síntomas depresivos se observó que ambos grupos mejoraron. Pero al estudiar que tanto mejoraron, se observó una reducción mayor en los síntomas depresivos en el grupo que jugó PvZ.

¿Esto significa que podemos reemplazar un psicofármaco por un videojuego? La respuesta, por ahora, es definitivamente no. Sin embargo, lo que sí podríamos hacer es sugerir que personas con síntomas de ansiedad o depresión que están bajo tratamientos tradicionales que complementen su psicoterapia jugando Plants vs. Zombies un rato.